Erasmus en Dirección Hotelera y Gastronómica

El Programa Erasmus es una experiencia que puede cambiar vidas. No solo ofrece la posibilidad de conocer nuevas culturas y hacer amigos de todo el mundo, sino que también puede ser excepcionalmente beneficiosa desde una perspectiva académica y profesional. En particular, para aquellos interesados en la dirección hotelera y gastronómica, un programa Erasmus puede abrir puertas y proporcionar una ventaja competitiva en esta industria altamente exigente y globalizada.

1. Diversidad Cultural

Uno de los aspectos más destacados de un programa Erasmus es la exposición a diversas culturas. En el ámbito de la dirección hotelera y gastronómica, esto es inmensamente valioso. Los hoteles y restaurantes atienden a una clientela internacional, y comprender y respetar diferentes culturas es esencial. Al estudiar en el extranjero, los estudiantes tienen la oportunidad de aprender de primera mano sobre las preferencias culinarias, tradiciones y expectativas de los huéspedes de todo el mundo. Una de nuestras alumnas que ha ido de Erasmus es Ruzanna Zakharyan, concretamente está estudiando en IULM, la Libera Università di Lingue e Comunicazione de Milán. – “Valoro la libertad que me ofrece el programa, ya que me permite crear mi propio horario y elegir entre una amplia variedad de temas que se alinean con mis intereses y pasiones, como la hospitalidad de lujo, la gestión de eventos de lujo, la comunicación, etc. Más allá de lo académico, tengo el privilegio de conocer gente de todo el mundo, lo que sin duda mejora mi conciencia cultural”.

2. Practicar idiomas

En el sector hotelero y gastronómico, el dominio de varios idiomas es una habilidad altamente valorada, por lo que participar en un programa Erasmus permite mejorar las habilidades lingüísticas al interactuar con personas locales y compañeros de diferentes nacionalidades, ya sea aprendiendo el idioma local o practicando una lengua internacional como el inglés, el francés o el alemán. Para Ruzanna, el programa Erasmus le ha permitido duplicar su experiencia internacional, ya que ya era estudiante internacional en España y, como dice: “Pronto el italiano también se unirá a mis habilidades multilingües”.

3. Redes de Contactos Globales

La industria hotelera y gastronómica está altamente orientada a las relaciones y las redes de contactos. Y durante una estancia Erasmus se pueden establecer conexiones globales que pueden resultar invaluables en el futuro. Conocer a compañeros de estudio y profesionales de la industria de diferentes países crea una red de contactos diversa y sólida que puede brindar oportunidades profesionales y colaboraciones comerciales en el futuro. Esta es una de las cosas que valora más Mireia Bosch, que está estudiando un semestre en el Universidad Haaga Helia en Helsinki: “El Erasmus me permite conocer nuevos contactos que podrán ayudarme en el futuro profesional y, sobre todo, a mejorar mi currículum; estoy aprendiendo a adaptarme en un país con una cultura completamente diferente a la mía y eso también me ayuda a obtener nuevas habilidades ya conocerme más a mí misma”.

4. Adaptarse a nuevas situaciones

Lo comenta Mireia y lo demuestran muchos estudios: trabajar y estudiar en un entorno extranjero fomenta la adaptabilidad. Los estudiantes aprenden a lidiar con desafíos culturales, administrativos y logísticos de manera efectiva. Retos que son frecuentes durante la vida profesional en hotelería, como el afrontar situaciones imprevistas y cambios rápidos. Para Ruzanna, esta experiencia le “ha fortalecido enormemente habilidades como la adaptabilidad, la comunicación y la sensibilidad intercultural, la resolución de problemas o la mentalidad global, y esas habilidades son invaluables para perseguir carreras internacionales y trabajar eficazmente en entornos multiculturales”.

5. Ventaja Competitiva en el Mercado Laboral

Tener una experiencia de estudios en el extranjero en el campo de la dirección hotelera y gastronómica es una gran ventaja en el mercado laboral. Los empleadores valoran a los candidatos que han demostrado independencia, resiliencia y la capacidad de trabajar en entornos multiculturales. Un programa Erasmus en este campo demuestra un compromiso con la excelencia y la voluntad de aprender y crecer en un entorno desafiante. De hecho, en el Grado de Dirección Hotelera y Turística de EUHT StPOL, el alumnado puede disfrutar de hasta 4 experiencias internacionales sumando los tres períodos de prácticas externas y el programa Erasmus.

6. Viajar y Crecer

“En menos de un mes ya he visitado 4 países nórdicos”, dice Mireia. Y es que no podríamos terminar este artículo sin mencionar el impacto personal del programa Erasmus. Los estudiantes adquieren una mayor confianza en sí mismos al abrir nuevos horizontes y superar obstáculos en un entorno desconocido. “Milán es un centro cultural que combina actividades modernas y vibrantes. Su reconocimiento mundial como capital de la moda sirve como una fuente constante de inspiración”, explica Ruzanna. Y es que no solo descubren nuevos puntos de vistas y maneras de hacer, también en ganan en autoconocimiento. Una madurez personal que a largo plazo se traduce en un mejor desempeño en la carrera laboral.

En resumen, un programa Erasmus en dirección hotelera y gastronómica no solo es una experiencia inolvidable en lo personal, sino que también puede ser una inversión sólida en el futuro profesional. Brinda a los estudiantes la oportunidad de adquirir habilidades y conocimientos valiosos, establecer conexiones globales y desarrollar la mentalidad y la confianza necesarias para tener éxito en una industria competitiva y en constante evolución.